La compra de alimentos ecológicos, de temporada y los producidos con sistemas de producción integrada, entre otros, aparecen entre los criterios de adjudicación que “pueden” ser tenidos en cuenta por los órganos de contratación de compra pública de alimentación y servicios de restauración.
Estos requisitos -voluntarios- aparecen en el borrador del Plan de Contratación Pública Ecológica de la Administración General del Estado (AGE), sus Organismos Autónomos y las Entidades Gestoras de la Seguridad Social (2018-2025), que está en información pública hasta el próximo 24 de abril.
Para promover la compra pública ecológica
Entre sus objetivos aparece promover la adquisición por parte de la administración pública de bienes, obras y servicios con el menor impacto medioambiental posible; servir como instrumento de impulso del Plan de acción de la UE para la economía circular y apoyar la transición hacia una economía baja en carbono.
En el plan se determinarán los productos, obras y servicios en los que la AGE va a promover un consumo público que tenga en cuenta parámetros medioambientales, así como los criterios ecológicos a tener en cuenta en sus distintas fases de contratación.
Afectará a 20 ámbitos, entre ellos la alimentación y servicios de restauración, la construcción y gestión de edificios, la iluminación interior de edificios, productos y servicios de jardinería o el suministro de electricidad.
Criterios ecológicos voluntarios
Los criterios medioambientales, voluntarios, previstos en él se basan en las actuales recomendaciones de contratación pública ecológica de la Unión Europea (UE), que pueden ser incorporados a los pliegos de contratación como criterios de adjudicación o de selección del contratista, especificaciones técnicas del contrato o condiciones especiales de ejecución.
El apartado dedicado a alimentación y servicios de restauración enumera los principales criterios de adjudicación que pueden ser tenidos en cuenta, con excepción de la restauración a bordo de trenes, que por su especial logística y limitaciones de espacio seguirán en la medida de lo posible estas recomendaciones.
Así, recomienda -además de la compra de alimentos eco (sin fijar un porcentaje, ni dar más detalles), de producción integrada o de temporada- la de productos de acuicultura obtenidos por métodos de producción ecológicos, la de productos animales con niveles de bienestar elevados, la compra a granel o en envases con contenidos elevados en materiales reciclados.
Cubiertos reutilizables, papel ecológico…
Asimismo, aboga por el uso de cuberterías, vajillas, cristalerías y mantelerías reutilizables; la utilización de productos de papel ecológicos; recogida selectiva de los residuos y formación del personal; la reducción al mínimo del uso de productos químicos peligrosos y el empleo de productos de limpieza y lavavajillas ecológicos.
Apuesta por la compra de aparatos de cocina con consumo reducido de agua y energía, o la mejora de las rutas de transporte y reducción del consumo de energía y de las emisiones de los vehículos utilizados para prestar los servicios de restauración.
Por último, habla de que las máquinas suministradoras de bebidas y fuentes de agua usen energía limpia y no produzcan residuos.
Los Departamentos ministeriales, los Organismos Autónomos y las Entidades Gestoras de la Seguridad Social establecerán en el plazo de un año desde la publicación en el Boletín Oficial del Estado del plan un marco de actuación en el que se fijen objetivos mínimos de incorporación de criterios ecológicos en los contratos formalizados en el periodo de duración del plan (7 años).
Fuente: https://www.efeagro.com/noticia/alimentos-compra-publica-ecologica/