El pleno aprueba por unanimidad la medida y aborda la necesidad de mantener los programas actuales que trabajan con las personas sin hogar.
El pleno de Barakaldo aprobó ayer, con la unanimidad de todos los grupos, una Guía de Contratación Pública Socialmente Responsable que marcará la inclusión de cláusulas relacionadas con los derechos de los trabajadores y las cuestiones medioambientales en los contratos municipales. La aprobación del documento pone fin al trabajo iniciado en el año 2017, y que ha incluido aportaciones del personal técnico del Ayuntamiento, los sindicatos y los grupos políticos representados en el Consistorio.
El pleno de Barakaldo celebrado en la tarde de ayer comenzó con un recuerdo a Alfonso Beraza, concejal del municipio por Herri Batasuna entre los años 1983 y 1987, tras su fallecimiento esta misma semana. Además de la guía, también se ratificó la ampliación otros cuatro años del convenio con el Ministerio de Educación para mantener el programa de formación Aula Mentor, que actualmente cuenta con 34 usuarios. Se debatió una petición de Elkarrekin Barakaldo y EH Bildu para mantener el programa de educadores de intervención de calle que trabaja con las personas sin hogar.
El concejal de Hacienda y responsable de contratación, Danel Sola (PNV), señaló ayer que el documento aprobado en el pleno «supondrá un antes y un después en la manera en la que se llevarán a cabo los contratos municipales, al marcar de manera clara y concisa las obligaciones en materia social, laboral, de igualdad o medioambiental a las empresas que firmen un contrato con esta institución».
El portavoz del PSE, Alfredo Retortillo, subrayó ayer que «las garantías sociolaborales y de otro tipo en la contratación pública son esenciales», y justificó así tanto la moción que ya avaló su grupo en 2014 como la moción socialista que en 2017 dio origen a la comisión que ha desarrollado el texto actual. Retortillo confió en que la herramienta también aporte a la institución local una herramienta para «defender un empleo de calidad y mejores condiciones laborales, especialmente entre los colectivos más vulnerables», reivindicó.
Respecto al ruego presentado para mantener la continuidad del equipo de intervención de calle, la concejal de Elkarrekin Barakaldo, Mariví Freire, alertó sobre el final del contrato vigente para el próximo 30 de junio al carecer actualmente de partida presupuestaria. La edil señaló que el trabajo realizado por el personal del programa «preserva la dignidad de las personas sin hogar» y advirtió que ha llegado a contabilizar «hasta 86 personas durmiendo en la calle», a parte de las que usan el albergue permanente del que dispone la localidad fabril. Además recordó que hay remanente de tesorería suficiente para continuar con el trabajo de estos educadores, que hasta ahora financiaba el Gobierno vasco.
Presupuestos participativos
Iraide Kareaga, de EH Bildu, el otro grupo impulsor del ruego, criticó que se fiara el refuerzo en la atención a las personas sin hogar a los presupuestos participativos. Recientemente se ha dado a conocer que la ayuda a las personas sin hogar ha sido una de las propuestas más votadas. «¿Qué hubiese pasado si no hubiera sido así? La próxima vez puede ahorrarnos tener que elegir entre instalar más baños públicos en la calle o ayudar a la gente en situación de vulnerabilidad», lamentó.
Además de este ruego ayer se abordó otro de Elkarrekin para hacer un reparto más justo de las subvenciones a clubes deportivos, y otro de Bildu sobre la necesidad de más aulas de estudio.
Foto: Instalaciones del albergue permanente para personas sin hogar. /
